En un lugar de cuyo nombre quiero acordarme Yacango, no hace mucho aconteció un hecho que se le quedaría grabada en la mente a la señora Teresa. Y así comienza este relato en el que muchos dirán que es falso pero la verdad radica en el espíritu de uno mismo.
Teresa era una niña
muy linda e inteligente a su corta edad, gracias a eso era muy querida por la gente de mi pueblo Yacango, pero como lo bueno atrae lo malo, también existían personas con un corazón oscuro los cuales que no querían a Teresita.
Un día de lo menos planeado la madre de Teresa envía a ella y sus hermanos hacia el cerro Mejía para que puedan conseguir el cactus seco, para quien sabe quién, solo que no fueron en el momento y lugar adecuado ya que lo que les pasaría la marcaria para toda la vida.
Se fueron a eso del medio día cuando el sol quema como la misma llama de fogata en invierno, la recolección de cactus fue un rotundo éxito lo único raro que paso fue que vieron un zorro grande de color negro con sangre en la boca y chorreando hacia el polvoriento suelo, típico de los enormes cerros de nuestro Distrito, Teresita y sus hermanos sabían que el zorro era un animal malvado que devoraba a los animalitos del pueblo como los cuyes , gallinas y otros animales domésticos que habitan aquí en mi pueblo dicho esto nuestros amigos empezaron a tomar piedras como proyectiles y lanzárselas al desdichado animal que de alguna manera no hacia nada por defenderse o mas bien las piedras no le hacían daño ,Teresita que había notado esto se asusto mucho y dijo a sus hermanos que pararan, el animal al lanzar un aullido desgarrador que hería hasta el alma misma empezaba a desaparecer en medio de la humareda negra con un desagradable olor a azufre .
Asustados por este acontecimiento se apresuraron a tomar cada uno sus cargas de cactus y así volver a casa pero nadie se imaginaba lo que iba a pasar en sus caminos de vuelta casa.
Descendieron del cerro a un paso no muy apurado al momento de llegar al lugar donde actualmente cruza la pista por la parte de arriba la asociación de vivienda ¨villa Yacango¨ se encontraron con lo que jamás en sus vidas, a muy corta edad y con unos ojos puros que aún no habían conocido el dolor de la vida, todos pararon los pasos al ver lo que tenían delante de ellos … era el diablo…rápidamente Teresita con las fuerzas enviadas desde el cielo ordeno a sus hermanos a que se ocultaran detrás de unas enormes rocas que tenían a unos pocos pasos de distancia y se pusieron a rezar hacia Taita Dios.
Las características del diablo eran aterradoras que de seguro hasta el mas valiente caería rendido por el miedo, tenía un cabello ruloso y negro que al parecer estaba muy bien cuidado que le llegaban hasta los hombros del cual resaltaban unos cuernos de color oscuro, llevaba un pantalón que le llegaba hasta las rodillas por lo desagarrados y viejos que se encontraban, en lugar de pies tenia unas patas muy similares a las de la cabra igualmente de color negras, su piel era de color rojo oscuro además de escamosa ,sin olvidar que llevaba un saquillo colgado en el hombro derecho y en la mano izquierda tenia una hoz enorme con un filo único que perecía que podría cortar hasta el mismo aire.
Teresita y sus hermanos que permanecían ocultos a merced de las rocas, muy asustados y tras un largo momento de espera y suspenso se atrevieron a ver lo que pasaba… pues el diablo se alejaba en la dirección en la que actualmente se encuentra la asociación de viviendas ¨Las Maravillas¨.
Nuestros amigos que se encontraban muy pero muy asustados corrieron hacia su hogar para contar a su madre lo que había pasado pues tenían que desahogarse con alguien por el mal rato que paso.
Los ancianos del pueblo al oír esta experiencia vivida por Teresita, comentaron que el diablo es uno de los dueños de la mina de Cuajone, pues dicen que una vez al año viene a cobrar su parte llevándose consigo el cobre mas puro y reluciente que se extrae de esta mina, además de llevarse las alma de mineros caídos que se encuentra vagando por entre el polvo, ya cargado con su botín inicia su retorno pasando por el pueblo de Yacango e irse en dirección hacia el mar de nuestra hermosa costa que “dizque” ahí se encuentra la entrada hacia el inframundo . Además de eso algunos dijeron que la mina traía la perdición con la contaminación y que la mayoría de pueblerinos querían ser mineros y no agricultores -comentan los ancianos- cuando el mineral se acabe los dueños de la mina cogerán sus chivas y se irán de aquí dejando un gran tajo abierto que nadie lo tapara devolviendo al pueblo de Torata en uno sin futuro e infeliz y solamente después de eso nos daremos cuenta de que no podremos comer Dinero.
Teresa al escuchar esto ultimo de los ancianos se pregunto ¿Sera acaso cierto la premonición de los ancianos? ¿La gente tomara conciencia del daño que produce la mina sobre el medio ambiente?....
Nadie lo sabe solo el tiempo hablara con su silencio y luego dirán que nadie les dijo, que nadie les advirtió….pero ya no habrá vuelta atrás.
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AUTOR:EVER QUISPE RAMOS
MOQUEGUA-TORATA-YACANGO
2017
